Consejos para armar un portfolio de maquillaje profesional
Un catálogo fotográfico cuidado y completo te permitirá mostrar tu trabajo profesional. En BeautyFile te contamos lo que necesitas para crearlo
Tu estilo, tu impronta personal y parte de los logros y desafíos alcanzados son algunas de las cuestiones que un nuevo cliente querrá saber sobre ti.
Para ello, una buena modalidad es elaborar un portfolio o catálogo con tu mejor selección de fotos.
Las ventajas:
Exhibirá tu preparación.
Más allá de la formación en una escuela de maquillaje reconocida, los posibles clientes y contactos desearán ver tus trabajos anteriores y la resolución de cada look.
Revelará tu sentido estético y tu manejo de distintas técnicas.
Mientras más variada sea tu carpeta de presentación, más oportunidades tendrás de dar a conocer tu talento y de ser convocado para trabajos más exigentes.
En definitiva, un portfolio te brindará la posibilidad de ampliar tu abanico laboral y desarrollarte en distintos ámbitos –como puede ser editorial, social o publicitario.
Si recién comienzas tu carrera, puedes realizar sesiones de fotos exclusivamente para enriquecer tu portfolio. También, postularte como asistente de algún maquillador o estudio establecido. Te ayudará a foguearte.
MANOS A LA OBRA
La estructura básica de un portfolio incluye una breve reseña de la trayectoria y el estilo del artista o profesional, una galería con trabajos realizados y la información de contacto.
Como plataforma, una de las alternativas son las versiones online, casi un requisito indispensable para los profesionales hoy en día y la modalidad que permitirá el mayor alcance posible. Además, existen páginas preparadas para desarrollar uno mismo y que no implican ningún tipo de gasto.
De todas maneras, las opciones impresas siguen vigentes y resultan muy útiles para que las futuras novias o quinceañeras infieran cómo se verá el maquillaje en las fotos de su álbum o, en el ambiente publicitario, como presentación a un director creativo.
para que luzca mejor
Los siguientes tips te ayudarán a distinguir tus elementos diferenciadores. ¡Tenlos en cuenta y lograrás un dossier memorable!
Elegir una portada que impacte
La primera imagen debe ser irresistible, para así captar de inmediato la atención del receptor.
Destacar trabajos con personalidades reconocidas
Privilegia las producciones con modelos o fotógrafos de renombre y marcas importantes. La lógica es que si ellos confían en tu trabajo, otros más lo harán.
Definir un criterio de organización
Las fotografías deben tener una secuencia lógica. Se pueden agrupar por paletas de colores, por técnicas (de las más sencillas a la más compleja) o por tipo de maquillaje.
Incluye testimonios
Una buena idea es incorporar en algún apartado opiniones de clientes. Sobre todo, si tu especialidad es el maquillaje social y de novias.
Demuestra tu versatilidad
La mejor manera será alternando fotos de looks elaborados con otros de acabados más prolijos. Para no parecer poco específico, puedes dividir las imágenes según las áreas de maquillaje o distinguir los trabajos del rubro que más te interese.
Escoge las mejores fotos
No es necesario saturar con muchas piezas. Entre 10 y 15 opciones bien seleccionadas serán suficientes.
A medida que ganes experiencia, tendrás más fotos para usar y podrás reforzar tu presentación.